La Confederación Hidrográfica permanece en vigilia porque el pantano del Talave estuvo a punto de desbordarse27.02.10 - 00:56 -
M. BUITRAGO MURCIA. / la Verdad
En tres meses se ha pasado de la sequía extrema al peligro de inundaciones. Los técnicos de la Confederación Hidrográfica del Segura están estos días pegados al teléfono para controlar el comportamiento del río Mundo -principal afluente del Segura- que se ha desbordado en algunas zonas de la provincia de Albacete, causando pequeños desprendimientos y cortes de caminos y carreteras. El río baja con un cauce teñido de rojo por el arrastre de tierras y sedimentos.
La alerta se ha focalizado además en el pantano del Talave cuya función es almacenar el agua trasvasada del Tajo. Ayer superaba el 80% de su capacidad con las aportaciones que está recibiendo de las lluvias y las escorrentías, pero ha vivido horas críticas porque ha estado a punto de desbordarse, dado su limitada capacidad de 35 hectómetros. La Confederación Hidrográfica ha mantenido un difícil equilibrio en el sistema hidrológico de la zona para evitar males mayores, según explicó ayer el presidente de este organismo, José Salvador Fuentes Zorita. El pantano del Talave recibe los caudales para los abastecimientos y los regadíos que dependen del Trasvase, pero se queda pequeño.
El reventón de Los Chorros del río Mundo, a cinco kilómetros de Riopar, sigue con toda su fuerza después de que la cascada rompiera el jueves pasado, apunta la Confederación. Todo un espectáculo que no deben perderse los amantes de la naturaleza porque se trata de un fenómeno que se prodiga muy poco en los últimos tiempos.
Reservas al 50%
Todo el caudal que se está almacenando y regulando en la cabecera ofrecerá a los habitantes del Segura una pequeña recompensa a estos años de sequía, puesto que se liberará una pequeña parte para alimentar las vegas media y baja. Por Cieza pasarán unos 40 metros cúbicos por segundo, el triple de lo habitual, y en la capital de la Región también se notará estos días. Este desembalse limpiará el río.
El organismo de cuenca puede decretar la próxima semana el fin de la fase de prealerta para entrar en una engañosa normalidad debido a la coyuntura actual favorecida por las lluvias.
El agua embalsada en la cuenca rebasó ayer el 50% de la capacidad total. Hay 570 hectómetros de reserva -menos 80 de embalse muerto-, casi tres veces más que la media del último decenio. El embalse del Cenajo, el mayor de la cuenca, roza también el 50% con 209 hectómetros de reservas. Por encima de éste, el pantano de La Fuensanta está al 70% y cuentan que es todo un espectáculo contemplarlo desde el puente de la Vicaría.
La alerta se ha focalizado además en el pantano del Talave cuya función es almacenar el agua trasvasada del Tajo. Ayer superaba el 80% de su capacidad con las aportaciones que está recibiendo de las lluvias y las escorrentías, pero ha vivido horas críticas porque ha estado a punto de desbordarse, dado su limitada capacidad de 35 hectómetros. La Confederación Hidrográfica ha mantenido un difícil equilibrio en el sistema hidrológico de la zona para evitar males mayores, según explicó ayer el presidente de este organismo, José Salvador Fuentes Zorita. El pantano del Talave recibe los caudales para los abastecimientos y los regadíos que dependen del Trasvase, pero se queda pequeño.
El reventón de Los Chorros del río Mundo, a cinco kilómetros de Riopar, sigue con toda su fuerza después de que la cascada rompiera el jueves pasado, apunta la Confederación. Todo un espectáculo que no deben perderse los amantes de la naturaleza porque se trata de un fenómeno que se prodiga muy poco en los últimos tiempos.
Reservas al 50%
Todo el caudal que se está almacenando y regulando en la cabecera ofrecerá a los habitantes del Segura una pequeña recompensa a estos años de sequía, puesto que se liberará una pequeña parte para alimentar las vegas media y baja. Por Cieza pasarán unos 40 metros cúbicos por segundo, el triple de lo habitual, y en la capital de la Región también se notará estos días. Este desembalse limpiará el río.
El organismo de cuenca puede decretar la próxima semana el fin de la fase de prealerta para entrar en una engañosa normalidad debido a la coyuntura actual favorecida por las lluvias.
El agua embalsada en la cuenca rebasó ayer el 50% de la capacidad total. Hay 570 hectómetros de reserva -menos 80 de embalse muerto-, casi tres veces más que la media del último decenio. El embalse del Cenajo, el mayor de la cuenca, roza también el 50% con 209 hectómetros de reservas. Por encima de éste, el pantano de La Fuensanta está al 70% y cuentan que es todo un espectáculo contemplarlo desde el puente de la Vicaría.
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